¿Cómo funciona la bolsa española?

¿Cómo nació la bolsa española?
El origen de las bolsas españolas son las antiguas Lonjas de Contra-
tación de Valencia, Barcelona y Palma de Mallorca, entre otras, que
sirvieron como centros de reunión permanente de compradores y
vendedores de mercaderías. Los mediadores en el mercado de valo-
res y mercaderías tradicionales fueron los Corredores de Comercio,
que actuaban también como fedatarios públicos en la contratación
mercantil y cuyo origen se remonta al siglo XIII.
La primera bolsa creada en España fue la de Madrid, en el año
1809 y consolidada en 1831. La creación de las bolsas de Barcelona,
Bilbao y Valencia fue posterior y como consecuencia de la existencia
ya en el siglo pasado de Bolsines de Valores en estas ciudades, que
tenían gran actividad y que fue preciso elevar a condición de bolsas,
para regularlos oficialmente. A inicios del siglo XVIII, se contrata-
ron los primeros valores mobiliarios, emitidos por la Real Compañía
de San Fernando de Sevilla, la Real Compañía de Comercio de Bar-
celona, la Compañía para el Comercio del Cacao con Caracas, etc.
Sin olvidar los valores emitidos por el Gobierno, en forma de «vales
reales», que se convirtieron posteriormente en Deuda Pública.
¿Cuál es la organización del mercadobursátil?

2.a) La Ley del Mercado de Valores, que es la normativa que rige la
actividad bursátil, reconoce como mercados secundarios oficiales a
las Bolsas de Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao. Cada una está
regida y administrada por una sociedad anónima, responsable de
su organización y funcionamiento interno. Sus accionistas son los
miembros de las correspondientes bolsas. Es decir, las sociedades y
agencias de valores, así como las entidades de crédito.
Junto a estos cuatro centros de contratación individualizados,
existe el denominado Sistema de Interconexión Bursátil Español
(SIBE) de ámbito estatal, integrado a través de una red informática,
en donde se negocian los principales valores admitidos a negocia-
ción en un Mercado Continuo. La dirección y administración de
dicho sistema corresponde a otra sociedad anónima, la Sociedad de

Bolsas, constituida por las Sociedades Rectoras de las cuatro Bolsas.
El SIBE fue desarrollado por la Bolsa de Madrid. Comenzó a funcio-
nar en septiembre de 1995, con 50 valores, y empezó a ser totalmen-
te operativo a partir de noviembre de ese mismo año, al incorporarse
el resto de valores del mercado continuo. El SIBE sustituyó al viejo
sistema de contratación CATS (Computer Asisted Trading System
o Sistema de Contratación Asistido por Ordenador), que comenzó
su andadura en 1988.
Para compensar y liquidar las operaciones se creó otra sociedad
anónima: el Servicio de Compensación y Liquidación de Valores
(SCLV),que tras su fusión con la Central de Anotaciones del Banco
de España, ha pasado a denominarse Iberclear. Sus funciones son la
compensación de valores y efectivo derivada de la negociación en
las bolsas y el registro contable de los valores negociables por ano-
taciones en cuenta. Todas estas sociedades pertenecen actualmente
a Bolsas y Mercados Españoles (BME), una compañía que cotiza en
bolsa desde 2006, y que, como ya se ha mencionado anteriormente,
disfrutó de monopolio en sus funciones hasta 2008. Actualmente, la
directiva europea de mercados e instrumentos financieros (MiFID),
permite a otras plataformas de negociación bursátil, como Turquo-
ise, funcionar en el mercado español como alternativa a la gestión
de BME. El objetivo final es incrementar la competencia en el sec-
tor para reducir las comisiones de negociación en los mercados. No
obstante, BME mantiene su liderazgo indiscutible en este nicho en
España, pero en Alemania, por ejemplo, la plataforma Chi-X cuenta
con cerca del 20 por ciento de la negociación del DAX.
Finalmente, los intermediarios del mercado son las sociedades y
agencias de valores miembros de la bolsa. Están sometidas a un régi-
men de garantías, fianzas y cautelas que impide, por ejemplo, que las
agencias operen por cuenta propia, aseguren emisiones o den cré-
ditos relacionados con los valores. Estas sociedades y agencias, ade-
más de los requisitos que contiene su normativa, deben convertirse
en accionistas de una bolsa para poder operar directamente en ella.
2.b) Unificación de mercados. Las sociedades rectoras de las
cuatro bolsas españolas, los mercados de renta fija AIAF y SENAF,
el de futuros financieros MEFF y los servicios de liquidación se han

integrado en la misma sociedad «holding» BME. Con ella se mate-
rializó el protocolo de intenciones firmado el 20 de junio de 2001.
Este «holding» engloba las diferentes actividades de los mercados
españoles, desde la negociación hasta la liquidación.